LECCIÓN 6:
 
Cómo realizar una toma desde lejos
 
  Tanto la trayectoria de la luz como el fondo determinan claramente la posición de la cámara para una toma desde lejos. Un poco más abajo –y predomina el cielo; un poco más arriba –y el primer plano ocupa más lugar. Una toma inclinada de los detalles esenciales para la composición de la fotografía desarrolla una leve diagonal, y por lo tanto crea una atmósfera emocionante. Se le debe prestar especial atención al efecto que produce el fondo. Las cumbres redondeadas que se suceden en armonía y también una palmera en la distancia, pueden ser partes integrantes de la fotografía si usted trabaja con puntos de diafragma bajos (altos valores de apertura de diafragma)
 
 Al hacerlo cada uno de los elementos deben estar bien proporcionados, ya que la cámara se enfoca en la totalidad del paisaje –de acuerdo con la apertura de diafragma que se elige- desde el frente hacia el fondo. Para poder reproducir el efecto tridimensional en la fotografía, el fotógrafo de paisajes debe estudiar tanto la dirección de la luz como la calidad de la luz muy de cerca. La luz del amanecer, o la luz cuando el sol está por caer, es ideal para disponer las áreas individuales de la fotografía de manera escalonada. Ambos contribuyen para modular la estructura del paisaje. Con el uso del filtro de polarización, se coloca mayor énfasis en las luces altas y las sombras.

La dirección de la luz y la calidad de la luz

La luz del amanecer muestra un motivo totalmente diferente del de la luz de la tarde o del ocaso. Debido a la baja posición del Sol, las imágenes de los paisajes durante las horas de luz diáfana de la mañana se ven moduladas según el espacio, con colores atenuados y una tendencia hacia la rendición de los colores fríos.

La luz resplandeciente del mediodía arroja sombras cortas y rinde colores casi neutros. Por la tarde, cuando esta luz fuerte cede ante una atmósfera más suave, las sombras modulan la imagen y convierten los paisajes en fotografías realmente impresionistas.

La luz del atardecer, ya teñida de rojo y plena de impacto dramático, produce fotografías llenas de un atractivo emocional. Sigue el ocaso, que cubre todo de una armonía en azul. Se requieren reacciones rápidas para poder capturar la luz residual que se desvanece en la película.


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