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Fotografía otoñal: El color no lo es todo


La clave para conseguir unas magníficas fotos otoñales está en tomarse el tiempo necesario para conseguir una buena composición y no sólo en plasmar el estallido de color de esta época del año.

En general, las fotografías de paisajes son hermosas, pero no siempre son el tema más interesante que fotografiar. Trata de buscar fotos más originales captando pequeños detalles: hojas secas en el suelo del bosque o simplemente una hoja suelta volando en el viento. Del mismo modo, puedes aprovechar el contraste del tono oscuro de los troncos con el multicolor despliegue del follaje otoñal.

Encontrarás la mejor luz, normalmente, un par de horas tras el amanecer o antes de la puesta de sol. La luz roja y de ángulo lateral del sol, creará sombras o formas interesantes ¡trata de aprovecharlas!

Aunque pueda resultar sorprendente, los días con cielo encapotado te ofrecen unas estupendas posibilidades de fotografía en esta época, pues la luz suave mejora los matices de color. En cualquier caso, es mejor que elijas un día soleado si vas a visitar un lago o riachuelo, pues el cielo azul reflejado en las aguas supone un contraste estupendo con el color del follaje.

En general una película de sensibilidad 400 es la mejor elección para el otoño. Esta película es muy versátil y obtendrás buenas fotografías tanto en días nublados como soleados. Esto resulta muy útil en estos días de tiempo constantemente cambiante.

Fotografías de Derek Doeffinger, Kodak Professional. Otoño al norte del estado Nueva York.